Se puede empezar a originar en los miembros de algunas familias disfuncionales y convierte a los sujetos de esas familias en personas hiper-vigilantes.
La codependencia también puede ser aprendida entre los miembros de la familia, un conjunto de conductas inadecuadas a fin de sobrevivir en un ambiente que experimenta una gran tensión y pena emocional causada, por ejemplo, por una pérdida importante, violencia intrafamiliar, adicción u otra forma de neurosis de un miembro de la familia, abuso sexual o una enfermedad crónica de un familiar o fuerzas externas a la familia, como la pobreza.
El estado de alerta es una defensa de nuestros cuerpos, algo temporal que nos ayuda a defendernos en momentos de peligro. Pero cuando ese estado se vuelve prolongado, la persona pierde el contacto con sus reacciones internas, ya que todo el tiempo su atención está afuera de sí misma y centrada en el miembro de la familia que tiene “la disfunción” por lo que aprende que su estado de ánimo depende de las situaciones externas y no de él mismo.
Cuando una persona vive su vida a través de los demás, va más allá de lo que exige el verdadero amor. Se quema hasta el punto de no quedar ya nada para sí misma.
Bienestar Prana 